El síntoma es la mejor respuesta que hemos sabido dar a unas circunstancias difíciles.

Tal vez te has interesado por la psicoterapia cuando has comprobado que, tras numerosos intentos para manejar y resolver las situaciones conflictivas, no consigues tu objetivo y te sigues sintiendo mal, sin saber por qué, como si estuvieras atrapado en una sensación de malestar psicológico de la que no sabes cómo salir.

Los síntomas, que solemos identificar como ansiedad, depresión, estrés, fobias, adicciones, insomnio, problemas sexuales, trastornos alimentarios, etc., suelen ser la parte más visible de un malestar interior, mucho más profundo, a veces existencial, relacionado con lo que está sucediendo en tu vida en el momento presente.

En la mayoría de las ocasiones, los síntomas surgen al estar viviendo una contrariedad relacional insostenible.